Día 3 y 4: Gyeongju

Tras no madrugar mucho, cogimos un Autobús hacia Gyeongju, una ciudad que fue Capital de la dinastía Silla. Aquí veremos y comeremos cositas tradicionales.

Ya tirando hacia el mediodía comenzamos a ver la ciudad, perdiendonos un poco por el mercado.

 Esto son tumbas de gente Pro de la antigüedad. En algunas puedes entrar y ver las escabaciones y reliquias de la época.

El Starbucks de época.

Una torre de astrología.

Y un Palacio con su lago, que estamos seguros que en verano está todo más bonito.

Pero vamos a lo importante, la comida de hoy:

Nos dirigíamos a un templo muy importante, el Bulguksa, pero paramos antes para comer unos fideos fresquitos con carne bulgogi. Al salir nos dimos cuenta de que eran las 16:30 y por aquí alas 17:00 cierran, así que tivimos que darnos la vuelta y volver al día siguiente.

pastelitos típicos de aquí.

Las distancias son relativamente largas, así que dimos una buena vuelta por el centro de la Ciudad y por el mercado, picoteando algo antes de ir al hotel.

Langostinos tempurizados bien ricos.

Gimbap de cerdo.

Al día siguiente seguimos la ruta, por la mañana fuimos a un pueblo super tradicional anclado en el pasado: Yandong. Por la tarde volvimos al templo que no vimos el día anterior.

 

Paramos a comer de vuelta a Gjeonju, en un restaurante que por ahora ha sido la comida del viaje: 17 platitos tradicionales y sus aperitivos, ahí van.

Aperitivos: Pancake con espinacas, dos ensaladas, una de ellas con wasabi, puré de boniato, nueces caramelizadas, porridge de pollo y unas tortitas coreanas.

Principales: arroz, sopa miso,  calabacín con salsa picante, TIBURON, hoja Siso con algo más, pescado picante, ensalada de brotes de soja y cerdo, navizas en salsa de soja, crema de setas, Bulgogi con setas, sopa con tofu, sopa con gelatina, tortitas coreanas, encurtidos, palometa desalada, tofu firme con cosas, cangrejo crudo con salsa agridulce, Kimchi y porritge de arroz.

y después de esta maravilla, el postre: Caqui y te coreano.

Aunque parezca mentira no acabamos tan llenos, pero tampoco rematamos todos los platillos.

Después de este deleite, fuimos al templo Bulguksa.

Y ya de vuelta, pasamos por la zona más tradicional del pueblo, muy bien iluminada.

Y cenamos en el mismo mercado que el día anterior: piel de cerdo extrapicante, pollo agridulce y unos postres super ricos de mochi frito con miel y queso!

Mañana nos dirigimos a Daegu, para ir hasta el templo Haeinsa.

Día 2: Lonja & Gamcheon Village

Hoy nos lo hemos tomado con calma.

Por la mañana fuimos al mercado de pescado muy famoso por aquí, ya que tienen todo vivito y coleando.

En el primer piso puedes comprar lo que quieras mientras que en el segundo piso te lo cocinan.

También puedes subir directamente, aunque las señoras son un tanto pesadas para que te sientes en su mesa.

Viendo un poco los precios, decidimos salir del mercado y "desayunar" en los locales del exterior. Escogimos un menú de pescado crudo y frito y Anguila a la parrilla.

Fue divertido, pero no estaba riquísimo la verdad, preferimos mil veces los desayunos japoneses en Tsukiji.

Después salimos hacia un barrio de Busan, con pequeñas casas viejas que modernizaron pintandolas de colores. El barrio tiene también un rollito artístico bastante curioso, con cuadros y esculturas por las calles.

Tras un largo paseo subiendo y bajando callejuelas, nos volvimos al centro a ver tiendas y el parque central de la ciudad.

Fresitas acaremaladas.

 Y bueno, todos los días tienen un final y para nosotros fue este brutal plato de pollo frito con Teok bokki picanton.

Aún estamos en el hotel reposando está salvajada que los Coreanos comen como si nada. Nosotros hemos caído rendidos y las últimas horas del día las hemos pasado en cama viendo series >.<

Mañana cambiamos de ciudad, iremos subiendo poco a poco hasta la Best Corea!

Día 1: Templos y Navidad en Busan

Comenzamos el primer día de viaje, ya reposados del jet lag.

Tras desayunar en el 7eleven, fuimos hasta el templo Haedong Yonggungsa, uno de los templos más bonitos de Corea, eso dicen...

Está bastante lejos,  en la costa Sudeste.

La verdad es que es pequeñito pero está muy bien localizado y es muy agradable de ver con toda la costa alrededor.

Hicimos un pequeño parón de café y nos dirigimos al siguiente templo, también bastante alejado. 

Pastel de pescado cocido ?

(Jesi: joder que fisna soy,hasta para comer el surimi ese levanto el meñique...xD)

Entre parones, metros y buses le dedicamos gran parte del día a estos dos templos. El segundo era el Beomeosa, en la cima de una montaña.

Antes de subir, Jesi decidió meterse en el local más Coreano posible, donde ni nos dejaron pedir porque las señoras solo sabían decir: Menú!!!!

Así que nos quedamos sentados de rodillas a esperar cualquier tipo de comida. Nos sirvieron Sopa con fideos caseros, kimchi, encurtidos y Gimbap ( rollo de sushi de vegetales). Muy rico todo!

Y ahora sí, la subida al templo (en Bus) y la bajada andando xD.

Tras la pateada, volvimos a coger el metro para volver al centro de la ciudad. Allí vimos las calles más comerciales y llenas de gente, perdiendonos unas cuantas horas comprando chorraditas.

Bueno a parte de compras, hicimos un poco el payasete en las tiendas Kawaii.

Como ya iba pesando el cansancio, nos volvimos hacia el hotel, donde por fin conseguimos solucionar el problema de la maleta estrabiada de Jesi, que realmente estaba a mi nombre y claro, los del hotel no tenían mi nombre añadido en la reserva y se lió todo un poco.

Cenamos en un shacke shack, franquicia que conocimos en NY y nos gustó muuucho.

Mañana más... FELIZ NAVIDAD!